SENDOA QUIJADA: «ME PARECE INMORAL TODO LO SUCEDIDO. ES INJUSTO E INCOMPRESIBLE QUE UNA OBRA PÚBLICA NO LA PUEDA UTILIZAR TODO EL MUNDO»

¿Qué ha conducido a esta situación, Sendoa?

La historia comenzó en la primavera de 2009, cuando habían comenzado las obras de mejora de la accesibilidad de mi barrio. Preguntamos al Ayuntamiento de Barakaldo sobre qué tipo de obra se iba a realizar en el barrio. Yo llevo viviendo toda la vida en ese barrio y me muevo en una silla de ruedas, primeramente mandé un e-mail al Ayuntamiento de Barakaldo y para preguntar sobre la situación, no recuerdo que hubiera respuesta alguna o no la vi.

¿Cuál fue la respuesta del Ayuntamiento?
Posteriormente un familiar fue al Ayuntamiento para preguntar sobre la situación, y las personas responsables del Consistorio nos atendieron de manera poco adecuada, en el pasillo, con respuestas muy poco adecuadas y groseras, respondiendo, que se iban a hacer las escaleras mecánicas sí o sí, y que si teníamos que subir la cuesta de la Inmaculada por un sitio algo irregular, íbamos a seguir subiendo por ese sitio porque no iba a ver ningún cambio.

¿Por dónde tenías que acceder al centro de Barakaldo?
En ese momento subíamos por una zona donde se hace un recorrido más largo y donde no está adaptado y por donde actualmente, cuatro años después, seguimos subiendo.

¿A quiénes recurristeis entonces?
Posteriormente hablamos con otros partidos políticos y nos intentaron ayudar para persuadir al ayuntamiento para que reflexionara sobre este asunto y cambiara el proyecto de obra y también acudimos al Ararteko para comentar el caso. Finalmente Fekoor se hizo cargo del caso y decidió interponer una demanda denunciando el incumpliemiento de la Ley Vasca de Aceesibilidad en este proyecto porque no es un proyecto inclusivo para toda la ciudadanía, y no lo pueden utilizar precisamente las personas que más lo necesitan, como somos las personas con movilidad reducida. Y no sólo las que utilizamos sillas de ruedas, también las personas que utilizan muletas, las personas mallores que tienen miedo a las escaleras, las familias con carritos de bebé…

¿A la vista de esto, los responsables municipales no han valorado otras alternativas?
Desde un principio en el ayuntamiento se negaron en todo momento a modificar un ápice el proyecto inicial, ni nos quisieron dar otra alternativa. La alternativa por la que han optado ha sido hacer una camino en zig zag, que nos deja en una situación parecida a la anterior, porque hay que seguir cansándose mucho para subir, y haciendo mucho recorrido. Es inexplicable que mientras que la gente sin problemas de movilidad puede subir por ella sin ningún tipo de cansancio, yo tengo que seguir llevando la silla y mi familia me tiene que ayudar, porque es imposible para mi subir la cuesta para llegar al barrio central de Cruces.

¿Qué supone para ti esta opción?
Creo que la alternativa tomada no es una solución adecuada, porque sigo teniendo que hacer muchos metros para subir, de manera que yo solo tengo esa alternativa. Esta situación me obliga a tener que utilizar siempre la silla eléctrica y no es algo que me venga bien, porque para mi salud me viene mejor una silla manual que me permita hacer ejercicio.

¿Cómo valoras esta situación?
Durante el proceso recogimos firmas para que pudieran considerar otro tipo de obra, pero tampoco tuvimos suerte. Me parece algo inmoral todo lo sucedido. Es injusto e incompresible que una obra pública no la pueda utilizar todo el mundo, ya que en esas escaleras mecánicas no las puedo utilizar con mi silla de ruedas.